Por RAFAEL ROFES PEREZ
No lo conozco personalmente, no lo he visto jugar en vivo
como a la mayoría de los compatriotas que llegan de la Isla a buscar suerte en
la mejor pelota del mundo, pero sé de sobra que este muchacho tiene estirpe de
estrella y quizás en ello influya el hecho de que por sus venas corre sangre cubana, esa que vigoriza a los nuestros en el mundo de las
bolas y los strikes.
Claro, hablo del receptor titular de los Azulejos de
Toronto, Jonathan Paul Arencibia, nacido en la ciudad de Miami en 1986, quien
fue proclamado según la web oficial de las Mayores.com como el jugador más
sobresaliente de la semana en la Liga Americana en la aún joven temporada de las
Grandes Ligas de Béisbol.
¿Por qué? Pues simple y llanamente porque el espigado enmascarado tuvo una destacadísima
actuación en los seis partidos en los cuales tomó parte la semana anterior, al extremo
de ligar de 25-9, lo que equivale a
promedio ofensivo de 360 y empatar así por el liderato de la Liga Americana con
cuatro jonrones, 10 empujadas y siete anotadas.
Arencibia encabezó el joven circuito con con slugging de 920
y estuvo cuarto en la liga con un total de 23 bases alcanzadas. Además, dió dos
dobles y recibió una base por bolas.
Pero lo que más me llama la atención de este destacado
receptor es que solo ha cometido tres errores en un total de 259 lances en lo
que va de contienda, por lo que exhibe mascota en mano un muy bueno 988 en un
beisbol donde los lanzadores se hacen bien difíciles a la hora de recibirles,
dada la gran variedad de envois que estos poseen.
Ofensivamente el
cubano-americano de 26 años ha tomado parte en 34 desafíos y en 121 comparecencias al rectángulo de
bateo compila para 256, producto de 31 hits en 121 turnos, de ellos siete
dobles e igual cantidad de cuadrangulares, con 26 impulsadas y slugging de 488.
Nada, amigos míos, que estamos en presencia de un formidable
catcher que tiene mucho por aportar aún en esta temporada y en las venideras. Y
se me ocurre decir que podría convertirse en un futuro no muy lejano, de
continuar con este paso, en un señor receptor, ¿no creen?
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