Por RAFAEL ROFES PEREZ
(Trabajo publicado en el periodico 20 de Mayo, de Los Angeles, California
http://www.20demayo.org)
Recuerdo haberlo visto tirar varias veces. Fue uno de los grandes prospectos como lanzador de la pelota en la Isla a inicios del 2000 y dueño de una recta de respeto que cruzaba muchas veces a los bateadores contrarios, actitudes que mostró durante tres temporadas.
En el 2004 decidió como muchos otros peloteros cubanos escapar de la Isla para probar suerte en el extranjero, una decisión nada fácil, pero que motiva cuando se sabe que la suerte por lo general es aliada de los que arriesgan.
Y en el caso de Maikel Nenínger se cumplió el adagio, pues hoy se siente realizado como persona y atleta, junto a su nueva familia formada en Costa Rica hace seis años.
“Tengo una magnífica compañera que mucho me ha ayudado en este país, madre de un hermoso niño de 11 años y una niña de 8, a quienes adoro porque realmente me ven como su padre. Eso es reconfortante, bello, más cuando se sabe que la familia original y seres queridos están lejos de uno”.
Hoy a sus 29 años se mantiene en activo jugando la Liga costarricense y entrena, además, a pequeñines en esa nación: “Es algo muy estimulante que me permite transmitirles a ellos mis modestos conocimientos, y más cuando se ve que el trabajo da resultados…” comentó.
“En estos momentos trabajo con infantes entre 11 y 12 años, y precisamente participamos la semana pasada aquí en el campeonato de pequeñas ligas, donde estuvieron presentes 8 naciones, además de tres elencos de Costa Rica, uno de ellos el Santo Domingo, del cual conformo su cuerpo técnico,
“Los muchachos quedaron en el quinto lugar, meritoria posición lograda por primera vez en la historia de este país. No te puedes imaginar cómo disfrutamos ese gran éxito”, aseguró.
Como todo pelotero, Nenínger tuvo en un momento determinado de su vida la ilusión de poder llegar al béisbol de las Grandes Ligas, el cual por cierto sigue detenidamente temporada tras temporada.
“Tuve la oportunidad de jugar por dos años en la Liga Profesional de Nicaragua. En una ocasión lo hice con los Indios del Boer, y al siguiente año con el equipo de León, con el cual tuve muy buenas actuaciones.
“En Dominicana estuve en la Academia de Tony Peña. Allí varios equipos de Grandes Ligas se interesaron en mí, como los Cachorros de Chicago, los Rancheros de Texas y los Astros de Houston, entre otros. Pero desafortunadamente no pude ver realizado mi gran sueño, más que todo por las conocidas razones migratorias, por lo que tuve que regresar a mi país de residencia, y hace dos años decidí definitivamente desistir de tal empeño”.
Aún así Maikel sigue con su recta endemoniada, le llega bien temprano al plato, lástima que en Costa Rica no pueda brillar como lo hizo en Cuba, Nicaragua y República Dominicana, puesto que en aquel país este deporte no tiene raíces profundas…
“Mira, me dice, todavía me defiendo con mi bola rápida, pero te digo con sinceridad que en Cuba me marcaron 94 millas, pero estoy segurísimo de que en otras ocasiones lancé mas duro, pero desgraciadamente no estaba disponible el famoso velocímetro. Cosas del béisbol cubano”, dijo sonriendo.
“Disfruto mucho jugar en la Liga de este país, y no soy el único cubano que lo hace, pues aquí también son claves en sus respectivos equipos los lanzadores Ariel Pino, Alex Torres y Alberto Cabrera”.
Nenínger también se desempeña como tercera base y designado, y en el caso de Alberto Cabrera, es un tirador del brazo equivocado que se erige hoy como unos de los mejores serpentineros de esa Liga y presenta este año balance de cuatro triunfos sin reveses.
En cuanto a algunas estadísticas del campeonato que se desarrolla en esa hermosa nación, les informo que precisamente el habanero Nenínger, del equipo Transtica SD va de líder en cuadrangulares, con un total de 9, y es cuarto en promedio ofensivo con 432 (de 88-38).
“Me encanta batear, lo disfruto un mundo, y siento gran satisfacción cuando las cosas me salen bien y puedo ayudar a mi conjunto”, agregó un tanto emocionado.
¿Algún último lanzamiento?
Sí, decir a mis familiares, amigos, que los llevo en mis pensamientos. A la afición que siempre recuerdo sus aplausos, su apoyo, y las gracias al periódico 20 de Mayo por permitirme compartir con los amantes del béisbol en Estados Unidos y de todo el mundo”.
LABOR DE NENINGER DE POR VIDA EN LA PELOTA DE CUBA
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